¿Alguna vez has sentido que te gustaría ayudar a los demás a encontrar el equilibrio físico-emocional...
Taller: El Camino del Dragón
“Mi armadura es como diez escudos, mis dientes son espadas, mis garras lanzas, mi cola un rayo, mis alas un hucarán y mi aliento la muerte” así se presenta el dragón Smaug en el capítulo 12 de la novela “El Hobbit” de Tolkien. El protagonista, Bilbo Bolson, viaja hasta la Montaña Solitaria para recuperar -junto a Gandalf, Thorin y la Compañía,- el tesoro custodiado por Smaug y que les fue arrebatado por el dragón dorado 200 años atrás…
Cada vez que imagino a este monstruo reptiliano custodiando toneladas de oro y piedras preciosas… no puedo dejar de pensar que el dragón es para nuestra cultura la encarnación perfecta de todo lo que nos atemoriza, de todo lo que nos paraliza y bloquea. Pero al mismo tiempo, también representa lo que tenemos que vencer para conseguir lo que más ansiamos.
Bert Hellinger, desarrollador de las Constelaciones Familiares, decía:
“Los tesoros más preciados están custodiados por el dragón más terrible. Para alcanzar los tesoros, tienes que ir al dragón y besarlo”
Te propongo un taller diferente
"El Camino del Dragón", una aventura que empieza mirando de frente a nuestros miedos. En la travesía aprenderemos a reconocerlos, aceptarlos, y gracias a distintas técnicas de la neurociencia y el neurochamanismo, aprenderemos a mirarlos como lo hacen los Ifaluk del Pacífico Norte, como algo positivo…
Al final del camino podremos por fin besar al dragón y conseguir nuestro preciado tesoro… No olvidemos que detrás del miedo están nuestros mayores deseos y también, las oportunidades de crecimiento…