Límites de la ciencia

Planta de tabaco luminosaNo se me ha ocurrido otro título que pudiese llamar la atención sobre esta reflexión y creo que "Límites de la Ciencia" puede dar una impresión confusa sobre lo que realmente quiero tratar. La Ciencia en sí no tiene más límite que la Naturaleza, pues es una actividad en continua evolución para lograr explicar el funcionamiento de lo observable. Lo que sí tiene límite y caducidad son las diferentes teorías científicas y el paradigma que estas defienden, y tengo la impresión de que existe una gran confusión sobre los términos Ciencia, paradigma y teoría científica, las relaciones y dependencias entre ellos.

Qué es un paradigma

Para intentar aclarar mi postura voy a definir qué entiendo por paradigma y para ello citaré a Thomas Kuhn (historiador y filósofo de la Ciencia) que en su libro "La Estructura de las Revoluciones Científicas" define un paradigma de la siguiente manera:

Leídas con detenimiento, te das cuenta de que las implicaciones de esta definición son muy profundas y limitadoras para la Ciencia. Un paradigma es el contexto (científico y social) en el que se hacen las investigaciones, el que marca qué hay que estudiar y cómo, el que define qué ideas o conceptos son indudables y, por tanto, determina cómo interpretar (o filtrar) las nuevas observaciones y descubrimientos. Porque, como apuntaba Kuhn, "incluso las observaciones cambian su naturaleza bajo diferentes paradigmas", pues los paradigmas incluyen la ontología de la realidad (qué existe y qué no).

Esta es una situación que parece darse continuamente en la Ciencia (supongo que porque está hecha por humanos con sus emociones y no por máquinas lógicas), y consigue que teorías que han quedado obsoletas por las nuevas observaciones, aguanten parche tras parche durante mucho tiempo. Y eso no es Ciencia. Un ejemplo claro de los peligros de los paradigmas en la Historia puede ser Lord Kelvin en 1900, cuando dijo: "No queda nada por ser descubierto en el campo de la física actualmente. Todo lo que falta son medidas más y más precisas", justo antes de las revoluciones de la relatividad, la cuántica y la teoría del caos. También es ilustrativo su cálculo de la edad de la Tierra, de hasta qué punto un preconcepto puede bloquear el progreso.

La ciencia debe ser una actividad en la que se pongan a prueba continuamente los conceptos y teorías aceptados, a partir de las nuevas observaciones que parezcan en contradicción, con el objeto de refinarlos o cambiarlos por otros que expliquen la realidad con mayor precisión. Porque de otro modo las estructuras ya creadas resistirán el avance tanto como les sea posible. 

En la actualidad creo que estamos llegando a una situación que parece adecuarse perfectamente a lo que Kuhn califica como crisis en la Ciencia, en varias ramas de ésta. Como consecuencia de la actividad de la "ciencia normal", se ha llegado a conocimientos que contradicen la interpretación habitual, con lo que surge una anomalía. Ésta conducirá a una crisis (cuando las pruebas se acumulen en "grandes cantidades") cuya única posible solución es un cambio en el modo de ver y analizar el problema, es decir, un cambio de Paradigma.

El paradigma biológico

Y este es el caso de la Biología, por poner un ejemplo. Hoy en día el paradigma imperante en Biología, y por extensión en Medicina, es el "reduccionismo" y "la ley del más fuerte". Vamos a ver que implican estos conceptos: 

Las investigaciones dentro del paradigma de la Biología interpretan los resultados bajo la óptica del agresor y la víctima (todo es una lucha), siendo la solución a los problemas el dotar a la "víctima" de las "armas necesarias" para hacer frente a los organismos que le quieren hacer daño. Quedan de lado las visiones más amplias, en las que los organismos que antes trabajaban en colaboración, por razones de "cambios ambientales" (ecológicos, bioquímicos, físicos, sociales, cualquier cosa en la que está inmerso el individuo), entren en conflicto. Sería como estudiar al humano sólo teniendo en cuenta los momentos de guerra. Se concluiría que la especie es únicamente agresiva.

Anomalías en el paradigma

Querer mantener estas ideas implica ignorar o interpretar de manera sesgada las evidencias que aparecen en las últimas investigaciones, como por ejemplo:

Conclusión

La Ciencia está libre en sí misma de dogmas, prejuicios, verdades inmutables y limitaciones y, para ello, se sirve del método científico para evolucionar. Es la condición humana la que nos lleva a elevarla al estatus de "nueva religión" y nos obliga a defender sus "leyes", como absolutas, ante cualquier ataque de "magufos y herejes". Pero eso no es Ciencia.

El miedo a defender una teoría ante preguntas que la retan implica la falta de un conocimiento profundo en ella. El rechazo a nuevas interpretaciones es signo de falta de objetividad, ya que las teorías no son más que interpretaciones parciales de la realidad. O lo que es peor, denota un interés por mantener el status quo, el contexto social y los equilibrios de poder imperantes. Porque, ¿qué pasaría si las bacterias y los virus no fuesen los malos sino el entorno en el que vivimos? ¿Cuántas justificaciones sociales habría que cambiar si la Naturaleza tendiese a la cooperación en lugar de a la confrontación? ¿Quién perdería si se demostrase que yo me sano por mí mismo?

Todos estos lastres al progreso científico podrían mitigarse si lo primero que se explicase de una teoría fuesen sus limites de aplicación: qué se ha supuesto sin demostración para que esto funcione y en qué rango de valores es aplicable. Es decir, qué porción de la realidad intenta modelar.