Este es otro estudio que refrenda el papel crucial que tienen las bacterias en el desarrollo sano de nuestro organismo, tal y como hemos informado en otros artículos "El cuerpo humano contiene más bacterias que células".

Cada vez se hace más urgente la reflexión profunda y sin dogmas, sobre todo por parte de los científicos de la salud, acerca del paradigma mecanicista del organismo y el papel patógeno y agresivo de los virus y bacterias, vigente en la actualidad. Ya que, si estos seres son necesarios para acabar de formar el intestino del bebé, entrenar al sistema inmune evitando las alergias y tienen influencia en enfermedades como puede ser la diabetes, no tenerlos en cuenta en los tratamientos puede llevarnos a empeorar la salud de los pacientes.

De hecho, ya hay pasos en este sentido con investigaciones para añadir bacterias a la leche maternizada, aunque consideramos que "la teta" es siempre el alimento ideal del bebé.

Artículo original de la web de la Universidad de Copenhague

El artículo

Si los niños encuentran una amplia variedad de bacterias están en menor riesgo de desarrollar la enfermedad alérgica más adelante en la vida. Esta es la conclusión de la investigación de la Universidad de Copenhague, lo que sugiere factores completamente nuevos en muchas enfermedades modernas relacionadas con el estilo de vida.

Hipersensibilidades o alergias, afectan ahora a un 25 por ciento de la población de Dinamarca. La cifra ha ido en aumento en las últimas décadas y, ahora, los investigadores del Centro de Dansk BørneAstma [COPSAC, estudios prospectivos de Copenhague sobre el Asma en la Infancia], de la Universidad de Copenhague, por fin son capaces de explicar, en parte, las razones.

Una variedad de bacterias ofrece protección

"En nuestro estudio de más de 400 niños se observó una relación directa entre el número de bacterias diferentes en sus rectos y el riesgo de desarrollo de una enfermedad alérgica más adelante en la vida", dice el profesor Hans Bisgaard, consultor en el Hospital Gentofte, jefe de la COSAC, y profesor de las enfermedades infantiles en la Facultad de Ciencias de la Salud, Universidad de Copenhague.

"Una diversidad reducida de la microbiota intestinal en la infancia se asocia con un mayor riesgo de enfermedades alérgicas en la edad escolar. Pero si hay una considerable diversidad, el riesgo se reduce, y a mayor variación, menor el riesgo."

"Por tanto hay una gran diferencia si el bebé ha nacido por vía vaginal, encontrando las primeras bacterias del recto de su madre, o por cesárea, lo que expone al bebé recién nacido a una variedad reducida de bacterias completamente diferente. Tal vez por eso mucho que muchos más niños nacidos por cesárea desarrollan alergias."

No hay bacterias que causen las alergias

En el vientre materno y durante los primeros seis meses de vida, las defensas inmunológicas de la madre protegen al bebé. La flora bacteriana en los recién nacidos probablemente ha sido afectada por los antibióticos que la madre ha tomado y las sustancias artificiales a las que se ha expuesto.

"Debo enfatizar que no existe una sola bacteria que produzca alergias", señala el profesor Bisgaard.

"Hemos estudiado los estafilococos y bacterias coli a fondo, y no hay ninguna relación. Lo que importa es encontrar a un gran número de bacterias diferentes en los primeros años de vida cuando el sistema inmunológico está en desarrollo y "aprendizaje". La ventana durante la cual el niño es inmunológicamente inmaduro y puede verse influenciado por las bacterias es breve, y se cierra pocos meses después del nacimiento.

"Nuestros nuevos hallazgos encajan con el gran número de descubrimientos que hemos hecho en los campos del asma y la fiebre del heno", explica el profesor Bisgaard. Al igual que las alergias, son desencadenados por diversos factores primeros años de vida.

Los investigadores reunieron los datos de un material único que consistió en 411 niños cuyas madres tienen asma. Esta cohorte fue monitoreada, entrevistada y examinada continuamente desde el momento en que los niños nacieron hace 12 años, y el grupo COPSAC ha publicado artículos a intervalos regulares con los nuevos conocimientos sobre la alergia y el asma desde entonces.

Estos hallazgos podrían ser relevantes para otras enfermedades modernas

El profesor Bisgaard reconoce la ironía de que algo que antes se percibía como una amenaza para la salud pública, es decir, las bacterias, ahora resultan ser una parte fundamental de una vida sana. También señala que puede haber otros acoplamientos, por ejemplo, entre la flora intestinal y la diabetes o la obesidad y otras enfermedades que afectan el estilo de vida del hombre moderno en Occidente.

"Creo que un mecanismo que afecta al sistema inmunológico debe repercutir en más cosas que las alergias, concluye. Me sorprendería si las enfermedades como la obesidad y la diabetes no estuviesen sembradas muy temprano en la vida y dependerán de cómo nuestras defensas inmunológicas estén preparadas por el encuentro con los cultivos de bacterias que nos rodean."