Taller de Coaching emocional para adolescentes

Coaching Emocional para adolescentes¿por qué hacer el taller?

Cada vez se hace mas obvia, para educadores (profesores y padres), la relación indisoluble entre comportamiento, rendimiento y emoción. De tal modo que hasta los neurólogos afirman ya que las emociones son indisociables de la racionalidad. Por tanto, se hace imprescindible educar las emociones para poder desarrollar al máximo el potencial humano y académico de la persona.

Esta realidad se hace especialmente importante cuando nuestros hijos y alumnos llegan a la adolescencia. Etapa de la vida en la que parecen transformase en “otras personas” y, si nos dejamos llevar por las emociones que nos provocan, vemos que “nuestros niños cariñosos y más o menos obedientes mutan en jóvenes cuando menos rebeldes, cuando no irresponsables e indolentes”. Aunque, por supuesto, este juicio no es estrictamente acorde a la realidad, la apreciación social que se está transmitiendo es de un cierto rechazo hacia esos jóvenes que empiezan a buscar su sitio en el mundo (rechazo implícito en la etimología de adolescente: “aquel que crece y, por tanto, está carente de algo”), generando un reforzamiento del malestar emocional.

La adolescencia representa el comienzo de una serie de cambios psicofisiológicos muy importantes que tendrán un efecto amplificador de las emociones. Muchos de los conflictos que se mantenían ocultos en la infancia aparecerán claramente en la adolescencia, provocando problemas de conducta, rendimiento y emotividad, que serán difícilmente controlables por el propio joven si no dispone de una buena educación emocional. Para “sobrevivir”, la solución más común entre ellos es generar un bloqueo emocional que les aísla aparentemente de su malestar (el típico pasotismo), pero que les impide ser conscientes de cuando están a punto de explotar, lo que provoca conflictos en la familia y en los centros educativos.

Pero, ¿cómo se consigue una buena educación emocional?

Para responder convenientemente a esta pregunta, es crítico tener en cuenta que las soluciones pueden ser radicalmente opuestas dependiendo de los preconceptos de los que se parta. Por ejemplo, si se considera que las emociones no se pueden liberar totalmente, solo reprimir o gestionar, las propuestas educativas a recomendar se orientarán en esa dirección: como conseguir que los exabruptos emocionales afecten lo menos posible. De modo similar, si se cree que es natural que los adolescentes sean distraídos y que no posean una atracción innata hacia el aprendizaje, se buscarán maneras de mantener su atención y de crear la motivación necesaria para superar sus resistencias.

Nuestro enfoque se basa los siguientes hechos comprobables:

  1. Las emociones se pueden liberar totalmente, como nos demuestran los niños, cada vez que riñen y se abrazan sin rencor a los 2 minutos. Solo hay que elegir la manera óptima para liberarlas entre las muchas que hay.
  2. Las respuestas emocionales y comportamientos de la adolescencia no son innatos. Son aprendidos a través de las experiencias vitales individuales y se pueden desaprender de forma permanente.
  3. La desmotivación y la falta de atención son los síntomas de un estado interno de agitación emocional que experimenta el adolescente, desarrollado a partir de las situaciones conflictivas experimentadas a lo largo de la vida. Si se liberan las emociones desestabilizadoras se vuelve al estado natural de paz y curiosidad, el propio del bebé.
  4. Las creencias y los gustos son decisiones no conscientes respaldadas por un estado emocional. Se modifican rápidamente si se liberan las emociones que se experimentan.
  5. La capacidad intelectual de una persona depende, entre otros factores, del riego sanguíneo que reciba su neocórtex. Este flujo es controlado por la respuesta biológica de estrés. Una persona con estrés no razona todo lo bien que le permitiría su potencial. Presionarla solo lleva a incrementar el nivel emocional, disminuyendo aún más el aporte sanguíneo al neocórtex, con la consecuente disminución de su inteligencia en ese momento.

Siguiendo esta argumentación, hemos preparado un taller con la extensión y herramientas necesarias para que los jóvenes reaprendan a hacerse conscientes de qué emociones están sintiendo en cada situación de conflicto que viven e integren cómo liberarlas eficazmente, de modo que sean capaces de volver al estado base natural de equilibrio y desprogramar los comportamientos conflictivos permanentemente.
Llegar a ese estado les otorgará las cualidades básicas de la inteligencia emocional:

Conocer y manejar estas herramientas ayuda enormemente en la labor de desarrollo equilibrado de los jóvenes, ya que les permite ser conscientes de sus emociones y comportamientos, y a corregirlos de forma autónoma, alcanzando mayor confianza, autonomía, rendimiento y respeto por ellos mismos y los demás.

Por supuesto, para que este cambio sea posible es indispensable la colaboración e implicación de los educadores, ya que lo que no sea puesto en valor por los adultos difícilmente será contemplado como algo importante por los adolescentes. Si no favorecemos con nuestro interés la práctica habitual con las herramientas es muy difícil que se genere el hábito de higiene emocional que asegura el bienestar futuro de los jóvenes. 

Objetivos

El objetivo fundamental del Taller de Coaching Emocional es ofrecer a los estudiantes las herramientas, habilidades y apoyo necesarios para posibilitar su completo desarrollo humano y académico. Por tanto, dentro de este objetivo está el contribuir a que el estudiante adquiera mayor autoestima, autonomía, respeto por él y por los demás, hábitos de higiene emocional, así como capacitarle para desempeñar eficazmente en sus estudios y vida personal.

Habilidades a desarrollar

Herramientas de trabajo

La herramienta principal que se propone en este proyecto es el Coaching apoyado en la liberación de las emociones conflictivas. El Coaching es una metodológica cuyo objetivo es el desarrollo de habilidades personales e interpersonales, basada en un proceso de reflexión guiado por un coach o facilitador que guíe al estudiante en sus quehaceres. Este proceso se vuelve mucho más rápido y profundo cuando se complementa con la toma de consciencia y liberación de las respuestas emocionales que programan los comportamientos y creencias de los alumnos.

Tipos de actividades a realizar

Temporalización

El taller deberá plantearse en trimestres. El tiempo mínimo de compromiso que permite la consolidación del grupo, integrar las herramientas y procesos del cambio interno y la consecución de los primeros objetivos.

El tiempo mínimo de cada sesión será de 1 hora.

Tamaño de grupos

El número máximo de participantes será de 10 por facilitador.

Metodología

Charla introductoria para padres y profesores

En esta actividad imprescindible se explicará a los padres y profesores la báse teórica y la metodología del sistema, qué cambios pueden esperar de los adolescente y el tipo de apoyo y valoración que será necesario que presten a los jóvenes durante el proceso. El objetivo es concienciar a los adultos de su papel clave para que los menores logren un equilibrio emocional profundo y permanente.

Sesiones con los adolescentes

El objetivo en el inicio del taller (4 a 6 sesiones) es asentar las herramientas fundamentales que habilitan el cambio: 

Primera sesión

Siguientes sesiones iniciales

Al finalizar estas sesiones se retomarán los objetivos personales y de grupo (seleccionados por el centro o los padres) para el trimestre, que deberán ser específicos, manejables y verificables. Si el objetivo es mejorar mi autoestima deberé trocearlo en subobjetivos más definidos como ser capaz de: hablar en público, presentarme a personas nuevas, defender mi postura ante ... (pareja, padres, profesores), etc. De este modo, se facilita la consecución del objetivo, dando ánimos y confianza para continuar en el proceso.

En cada sesión se trabajarán los temas específicos relacionados con los objetivos seleccionados a través de dinámicas y procesos de autodescubrimiento de Coaching, apoyados con técnicas de liberación emocional.

Sesiones temáticas de trabajo

Elementos didácticos clave

  1. El tipo de dinámicas, explicaciones y trabajo personal se adaptará a cada grupo según sus necesidades.
  2. Debe siempre quedar muy claro que se puede realizar un cambio interno profundo sin necesidad de contar abiertamente el objetivo a conseguir. Esto permite mantener la intimidad en los temas que se requiera sin perder la posibilidad de avanzar.
  3. Al finaliza el trimestre habrá una puesta en común de celebración de las mejoras conseguidas.
  4. Para que las clases del grupo sean lo más prácticas posible, la base teórica de las técnicas y la justificación científica de su efectividad se facilitará en vídeos que se puedan consultar libremente.Foro

Posibles temas a tratar en el taller

Documentos asociados

documento pdf Programa detallado